Es la capacidad para identificar los patrones y las causas de los problemas en diferentes contextos socio-culturales y de diversa naturaleza, utilizando para ello varios marcos de referencia y puntos de vista, y tomando decisiones más o menos sistematizadas y/o creativas en función de la naturaleza del problema, de los procedimientos y normas institucionales, así como la trascendencia del mismo en el entorno.